viernes, 25 de noviembre de 2005

Porque Viña tiene Festival !

Y yo que estaba convencido que mi primer mensaje a la blogosfera sería un artículo sobre política nacional, o algún sesudo y crítico -pero siempre ameno- análisis sociológico de los resultados de alguna encuesta, o alguna historia sabrosa de las muchas que guardo del colegio o de la universidad, o algún comentario sobre un libro, disco o película... o algo por el estilo...

Seguro que todo esto –y otras cosas que irán surgiendo en el camino- irá apareciendo en este espacio. Para compartir, para conversar, para mostrarles algo de lo que soy o estoy siendo, de mis intereses e inquietudes, y recibir algo de lo que ustedes ven, algo de lo que sienten, algo que pueda serles útil.

Pero, como decía Rubén Blades, "la vida nos da sorpresas" y aquí me encuentro escribiendo con el corazón, sobre otras cosas.

Les cuento: resulta que mi hermana –la Eli Morris- presentó en septiembre, por primera vez en su trayectoria musical, un tema para la competencia folclórica del Festival de Viña del Mar. A mediados de octubre le avisaron que había quedado pre-seleccionada entre cerca de 300 participantes, junto con otros 5 temas. El pasado viernes 18 de noviembre en el Teatro Municipal de Viña fue el evento de selección final. Yo estuve ahí en la Fila H y fui testigo del triunfo de mi querida hermana, acompañada por su grupo.

Hubo cosas “pintorescas”, como la furia de la barra de la Carolina Soto –cantante de Rojo- que quedó eliminada de la final internacional. Su voz e interpretación la encontré muy buena, pero la canción no la acompañó. Pifiaron a Sergio Lagos, al jurado, al humorista que estaba para distender la jornada, al “hombre resorte” (un extrañísimo número de variedades que los creativos de Canal 13 consiguieron en Rumania), en fin...

El asunto es que cuando ya iba a comenzar la competencia folclórica –que era a lo que en realidad habíamos ido- los nervios en mi fila cundían. Yo creía que la galucha furiosa no tendría compasión con mi hermana Eli, que para más remate abrió la competencia. Pero se produjo la sorpresa. Tras los primeros acordes de guitarra y la irrupción de un suave murmullo de voz, el público se silenció y surgió la magia. Sin mayor parafernalia y con una postura muy sutil sobre el escenario, la Eli se ganó al público. No estoy exagerando. Así nomás fue.

Después de su canción vino Lalo Vilches con una cueca entretenida pero muy parecida a muchas otras que uno puede escuchar en Fiestas Patrias, y un dúo de pascuenses que más que por su voz o dominio instrumental destacaron por su baile. El jurado se pronunció entre estos temas y escogió a la Eli por paliza. Luego vino la final con un bello tema de Mariela González, que había sido seleccionado con el mismo sistema el martes anterior. Y ganó la Eli. De los 5 votos del jurado, el marcador final fue 3-2. Euforia entre amigos y familiares. Reconocimiento espontáneo del público en general. Eli Morris en Viña 2006 !

Aparte de la alegría natural por ser mi hermana, creo que es un merecido reconocimiento para su carrera como artista, por supuesto sin tampoco creerse el cuento del estrellato y todo eso. Aquí no empieza ni termina nada, hay que seguir trabajando, pero pucha que da gusto ver reconocida la calidad musical, en un país tan mezquino con sus artistas y músicos.

Yo la vi a la Eli cuando en la casa recién comenzó a sacar de manera autodidacta los primeros acordes en guitarra, con la ayuda de esos viejos cancioneros de La Bicicleta. Esto era por ahí por fines de los ochenta. En Chile estaba por morir la era del terror de Pinochet y se anunciaba el parto inminente de la nueva democracia. Y tal como en el país, en la Eli también comenzaba a parir una nueva era, la de la música.

Entre fines de los ochenta y comienzos de los noventa conocimos a la Eli-actriz, que luego se reconvirtió en Eli-músico. Así, vinieron sus múltiples excursiones por el charango, el cajón peruano, el saxofón, los tambores brasileros. Sus estudios de sonido en la Chile, sus pasos por Chilhué, Fa-fandango, Alheña, su trabajo de los últimos años con su compañero José Seves, en un camino marcado por la curiosidad, creatividad y muchísima perseverancia, donde todo –lo bueno y lo malo- ha servido de aprendizaje...

Pero en realidad el talento asomaba desde mucho antes. Haciendo memoria, creo que su primera composición nació por ahí por 1980 o 1981. Estábamos en Paris por algunos días de vacaciones, esperando la Navidad y el Año Nuevo. En la casa del pintor Cremonini, donde alojábamos, había un piano. Un día jugando, (yo tenía 6 ó 7 años) veo a mi hermana frente al teclado enseñándome una melodía misteriosa y bella que ella había descubierto, o más bien creado. Aún la tengo en mi memoria, quien sabe si pronto renace convertida en canción.

No dejará de tener su encanto estar en febrero en la Quinta Vergara, haciéndole barra a mi hermana. Y es que el Festival de Viña -con todo lo malo que puede ser, lo reconozco- es también parte de mi vida. En 1983, cuando vivíamos en Viña en plena dictadura y recién retornados del exilio, nos juntábamos donde mis abuelos a hacer apuestas sobre los finalistas y ganadores. En 1984 fuimos invitados por mi Nona y vimos a Bosé, Feliciano, Titánic... inolvidable, sobre todo porque esa noche, con una fiebre y un malestar general, tuve los primeros síntomas de una hepatitis que me tuvo un mes en cama. Luego, siempre en verano lo seguí por la tele. En 1991 fuimos con gente de la familia de Valparaíso a ver a los Illapu, gran emoción recién recuperada la democracia. También estuvieron Mecano, Lucerito y creo que Emmanuel. En ese momento no lo sabía, pero también estaba en el público mi futura mujer, Andrea. En los años siguientes no he vuelto a ir, pero creo que casi nunca me lo he perdido por la tele...

Y así pues, aquí se inaugura oficialmente este, mi blog. La verdad es que esta idea la venía acariciando desde hace mucho tiempo. Razones por las que no lo había concretado antes... muchas, probablemente muy similares a las de tantos. "Es que no encuentro nada que decir", "Es que no tengo tiempo", “Es que lo que quiero decir no está 100% listo”... Ahora ya no hay excusas. Felicitaciones y Gracias Eli también por este empujón.